Cercanos a la celebración de Acción de Gracias, es un momento perfecto para reflexionar sobre el poder transformador de la gratitud. En The House Project, cada día damos gracias por la oportunidad de servir a quienes más lo necesitan. Junto con el apoyo de quienes se unen a nuestra misión, logramos iluminar las vidas de más de 500 personas olvidadas y marginadas cada mes.
La gratitud no es solo un gesto, es una fuerza que transforma corazones, incluso en los momentos más difíciles. Agradecer es ver lo bello en medio de los desafíos y confiar en que todo puede mejorar. Este poder es lo que nos une a todos, desde quienes formamos parte de The House Project hasta aquellos cuyas vidas iluminamos juntos.
En Maracaibo, Venezuela, una ciudad donde el 45.1% de los hogares se ven obligados a pasar un día entero sin comer al menos tres o cuatro veces a la semana, según el informe de seguridad alimentaria de Codhez (2023), brindamos cerca de 2,400 platos de comida nutritiva al mes. Amanda, una niña de 6 años, refleja el poder de la gratitud cada semana al recibir su alimento. Con una tierna sonrisa, nos dice: "La comida es pura y sagrada, y nosotros no tenemos. Gracias". Sus palabras nos recuerdan que incluso en las situaciones más difíciles, el agradecimiento tiene la capacidad de iluminar.
En La Guajira, Colombia, en el municipio de Uribia, donde el analfabetismo alcanza el 49,5%, apoyamos a la escuela semi-internado Kauwanana, donde 28 niños y niñas reciben educación y alimentación. Cada mes, realizamos actividades que llenan de luz sus días. Este mes, trabajamos el valor de *Anayawachijaa*, que en wayuunaiki significa "Dar gracias". A través de juegos y una cartilla bilingüe, los niños expresaron su gratitud por su tierra, sus clases, sus maestros y mucho más. Sus sonrisas nos reafirmaron el poder que tiene la gratitud para transformar sus vidas.
La gratitud también está presente en Agra, India, donde Laxmi, de 9 años, y Shivani, de 6, han enfrentado la pérdida de su padre. Su madre, llena de amor y fortaleza, agradece profundamente el apoyo de GreenHouse, que permite que sus hijas tengan acceso a una alimentación adecuada y a la educación que necesitan para soñar con un futuro mejor.